DÍA DE LAS MADRES
- Elina Dib
- 10 may 2018
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 11 may 2018
¿Publicidad para incentivar ventas o un genuino intento para agradecer y honrar a quien nos dio la vida?
Los que trabajamos en publicidad sabemos de antemano que en mayo tenemos el día de las madres por excelencia como el mejor pretexto para ofrecer descuentos y ventas nocturnas, ofertas y pretextos para vender cualquier cosa. De hecho yo vendí unas camisas y unos mandiles este año, años pasados conciertos, pays, bueno, ya hasta perdí la cuenta. Qué bueno que queramos celebrar a la madre dándole un detalle, se lo merece, bueno, NOS LO MERECEMOS! Pero como siempre, lo mejor sería retomar el
motivo y reflexionar sobre la labor de las mamás, su importancia para la vida de cualquier persona y del mundo entero y por lo tanto los retos a los que nos enfrentamos hoy en día.

Yo tengo la fortuna de ser madre por partida séptima (el primero lo perdimos) y los demás hacen que yo me pierda entre risas, impaciencias y ocurrencias. Cada año disfruto como nadie los festejos que los niños hacen en la escuela, su sinceridad y su ternura en medio de los detalles que tienen para mi me dejan con el moco tendido y desarmada por completo. ¿Qué les puedo decir? lloro hasta por los "criaturos" que no son míos, los de otros grupos. En fin, soy un manojo de lágrimas y de emoción contenida, porque me hacen recordar que esta labor que parece no tener fin es simplemente la mejor que Dios me pudo confiar.
Mira que entregarme la vida de 6 personas para que junto con su papá las moldee, leas provea de esperanza, de ilusiones, de herramientas para enfrentarse a la vida, de ganas de ver por otros, de amor para dar y regalar, de coraje para luchar por ver a su país mejorar, de buscar que otros conozcan a Dios cómo en casa les hemos enseñado y compartan el amor por donde pasan, es una labor digna de sentirse profundamente orgulloso y siempre afortunado. Por lo tanto hay mucho que celebrar y honrar el día de las madres!
Ser madre hoy en día es un reto pues parece que está peleado con construir sueños personales o profesionales, pareciera que está peleado con hacer vida de pareja o con vivir un mundo de diversión.
Eso es lo que a muchos les hacen creer. No se crean esas mentiras que les cuentan, todo está en recordar día con día, qué es una misión que requiere de todo tu "Ser profesional" de tu "ser soñadora" de tu "ser esposa" nuestros hijos necesitan de vernos en medio de todas esas facetas luchando por hacer crecer nuestra vida en una forma multi-disciplinaria, porque la vida es así, de todo un poco, no divide, solo un aspecto.
Buscar integrar todos nuestros anhelos junto con la misión de ser padres es el mejor regalo que les podemos dar a nuestros hijos, nos los prestan un rato para enseñarlos a defenderse de los retos que la vida nos propone y la vida siempre presiona.
Es verdad que debemos protegerlos, mas no mutilar sus capacidades ahorrándoles cualquier pena y frustración, es verdad que demandan mucho tiempo, mas podemos integrarlos a labores distintas para que crezcas tu y crezcan ellos. A veces habrá que poner en pausa proyectos personales, profesionales y darle lugar exclusivamente a atenderlos, otras veces tenemos que ser creativos para que nos acompañen en nuevos proyectos, inclusive enseñarles a participar en su casa en labores de acuerdo a su edad.
Ser madre es una labor maravillosa, a mi me ha convertido en una mujer mucho mas grande y generosa de lo que yo jamás pensé que podía llegar a hacer, mucho más paciente de lo que jamás fui, más audaz, mas creativa para buscar soluciones en poco tiempo y con poco dinero, para generar más recursos cuando no hay, pero sobretodo me ha dado la oportunidad de amar mucho mas de lo que jamás me hubiera imaginado.
Entregarse a cada momento es agotador, si, pero también es la mejor forma de construir una mejor persona no solo para ti, sino para tus hijos, para tu familia, para tu país. ¿Queremos tener un mundo mejor? Generosidad en contra del egoísmo es la mejor medicina. Dar para fomentar la generosidad y la alegría, dar el espacio a los hijos para que también se donen también es educarlos en generosidad.
Nos quejamos de la violencia en este mundo, de los tremendos caos viales, de la contaminación, de los asesinatos, de la dureza de corazón hacia los animales etc.
Si a las que les toca compartir su ternura natural no quieren hacerlo, si a las que les toca enseñar la donación no quieren hacerlo, si las que enseñan a perseverar ante las dificultades se rinden, ¿qué mundo tendremos?
HACEN FALTA MADRES que quieran serlo, sin dramas, sin victimizaciones, sin desesperanza. Madres como tú, que crezcan en medio de las dificultades, que gocen en medio de las cosas de todos los días, que no teman, permitirles a sus hijos equivocarse, madres que les muestren a sus hijos cómo cambia la vida de una persona cuando confía en Dios y le entrega cada actividad, madres que permitan que sus hijos vivan las consecuencias de sus actos, madres cariñosas que enseñen de bondad y caridad para el más necesitado.
Ser madre es un regalo y una responsabilidad grandiosa, la doble oportunidad que nos dio Dios de ser mejor mientras ayudamos a otros a crecer. Una entrega que no se da y se queda vacía, por el contrario, se llena cada día de alegría y amor aquí en la tierra y construye un cielo enorme en la eternidad.
Muchas felicidades a mi mamá, a mi suegra y a mis abuelas, toda mi gratitud por su ejemplo y el cielo que han construido.
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